Sobre nosotros
Maveg nace directamente de las entrañas. De la honestidad y empatía que nos caracteriza cuando hablamos con alguien y escuchamos aquello que desea. De esas ganas de darle a un espacio el lugar que se merece. Ponerle a esa cornisa ese toque de color en compañía de una planta. O de darle a ese rincón la calidez que le falta con algo muy personal que te caracteriza y que quizás todavía no sabías. Nace también de la ilusión de ver en el rostro de aquellos que confían en nuestro trabajo esa cara de felicidad por haber encontrado su zona de confort. Su rincón favorito.
Cuando nos embarcamos en esto queríamos llegar hasta aquellos que como nosotros aman la luz y las sombras que ésta proyecta cuando entra directamente en un espacio y dibuja a su paso algo sobre la pared. Porque Maveg es tan simple y placentero como ese café de tarde en un sofá de pana delante de una chimenea. Tan natural y fresco como la combinación de la madera con el aroma a planta y flores silvestres.
¡Porque nos encantan los hogares con vida e imperfectos! Hogares donde pasan cosas… donde los libros están colocados sin orden alguno y los cojines del sofá acaban en el suelo junto a las mantas cuando toca tarde de peli. Porque solo si un hogar se parece a quien lo habita se convierte en auténtico; en una casa Maveg...